LA HISTORIA DE NATI

Encontré un espacio para detenerme a pensar, a sentir, a conectar con esta beba que venía en camino y con esta mamá que yo iba a ser para ella. Lloré, me reí, me encontré, me acepté, me perdoné y me preparé para disfrutar a mi segunda hija y a mi nueva familia de 4.

Mili y Agos desde un lugar de escucha, respeto, cariño y profesionalismo me orientaron y acompañaron en este crecimiento. Las chicas de mi tribu me dieron perspectiva, me mostraron que la maternidad puede tener un poco de todo y que con la compañía adecuada todo puede ser más fácil, más llevadero y más lindo.

Por eso sigo disfrutando, compartiendo y aprendiendo con ellas cada semana en los encuentros de crianza. Gracias por sostener y ser parte de este momento de mi vida".

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