La experiencia del parto deja una profunda huella sobre la salud mental de las madres, y esta huella a su vez está directamente condicionada por la atención y el trato recibidos, por la posibilidad -o no- de tomar decisiones con respecto a su parto, por las intervenciones que se hagan sobre su cuerpo, o algo tan sencillo como la posibilidad de estar acompañada por quien desee.

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Es paradójico pensar que la maternidad y la soledad muchas veces puedan ir de la mano. En este artículo te contamos acerca de los cambios psicológicos que atraviesa la mujer al convertirse en madre y de porqué los grupos de crianza pueden convertirse en un aliado en esta etapa de su vida.

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Muchas mujeres asocian el parto directamente con la epidural. Pero, ¿cuántas personas son conscientes del impacto que este procedimiento puede tener en el nacimiento y en los días siguientes? Esta estudiado, que la epidural disminuye las hormonas maternas, particularmente la hormona del amor, la oxitocina, fundamental para la eyección de la leche materna, y como mediadora del vinculo mamá-bebé provocando un sentimiento amoroso. Esto último favorece que la madre desee y busque la cercanía de su bebé, aumentando los sentimientos de confianza y bienestar maternos e incrementando la autoestima. La BUENA NOTICIA: es posible recuperar las hormonas de la maternidad tras la epidural. Te contamos cómo.

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El Instituto Europeo de Salud Perinatal nos alerta acerca de la importancia del contacto piel a piel durante las primeras dos horas de vida del bebé. Este encuentro resulta ser el factor más importante para predecir el éxito y la duración de la lactancia, así como para que se establezca un vínculo óptimo entre la mamá y el bebé. Por esto, es importante conocer y elegir el lugar donde nacerá nuestro bebé. Hablarlo con el obstetra o también acercarse a la institución para conocer cuáles son los procedimientos que se llevan a cabo una vez que nace el bebé. La diferencia es muy grande cuando llegamos a parir conociendo el lugar, sabiendo, como padres, cuáles son los procedimientos que se van a seguir con nuestro bebé y eligiéndolos; que cuando nos encontramos frente a sucesos inesperados y no deseados, envueltos en un torbellino de emociones, el cual muchas veces nos inhibe a exigir lo que sabemos es un derecho. Una vez una madre me dijo a horas de parir: "...tenía tan claro cómo quería que fuera, cómo lo soñaba, pero estaba desnuda, en todos los sentidos y no pude, no pudimos en ese momento frenar lo que iba sucediendo".

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Nos resuena fuerte...pero es tan real. ¿Cuántas veces hemos querido huir sin saber bien a dónde queremos ir? ¿Cuántas veces nos sentimos desorientadas, sin fuerzas, y culpables? Compartimos el testimonio de una MUJER que logra transmitir las vivencias y emociones que genera esta etapa...porque seguimos siendo mujeres, aunque podamos vernos en el espejo, por un tiempo, sólo como madres.

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Las caricias son un alimento emocional para los bebés. Los beneficios de prácticar masajes a tú bebé son muchos: entre ellos promover lal relajación, facilitar su dormir y disminuir el estrés. Pero lo más importante de todo, es que enriquece el vínculo y genera un encuentro muy valioso entre los padres y el bebé.

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La Organización Mundial de la Salud (OMS) publicó 26 nuevas recomendaciones para fijar estándares e intentar reducir las intervenciones médicas innecesarias en el parto.

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La mirada es constitutiva en el ser humano...

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Esta semana del prematuro nos convoca a todos a trabajar sobre el derecho de la familia a recibir información y participación en todas las decisiones sobre la salud del bebé a lo largo de su internación neonatal y pediátrica.

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¿Por qué resulta tan importante el encuentro con nuestro sentir y nuestro saber durante el embarazo?

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